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jueves, marzo 28, 2024
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Cristina Kirchner recargada: “ganar las elecciones para no cambiar nada, mejor quedarse en casa”

La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner aseguró hoy que “la unidad del Frente de Todos no estuvo ni estará en discusión”, advirtió que “el endeudamiento criminal de los cuatro años del macrismo” es la causa principal de los problemas económicos que atraviesa el país y trazó un duro diagnóstico sobre algunas áreas del gobierno, como la falta de coordinación entre organismos del Estado para frenar “el festival de importaciones” que incide sobre la capacidad de acumular reservas.

Sus dichos fueron en el marco de un plenario de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) realizado en Avellaneda, en donde la expresidenta expuso sobre la coyuntura económica. Con sus dichos exhortó a ejercer un mayor control sobre las grandes empresas, y cuestionó el proceso inflacionario al que focalizó en los efectos de las importaciones, el déficit y la evasión de activos. “Este proceso ultra inflacionario que vivimos en Argentina es producto del endeudamiento criminal de los cuatro años del macrismo”, enfatizó.

En ese sentido, precisó también que “el gran y real problema de la Argentina es la bimonetarización” porque en el país “no faltan dólares”, sino que “se evaden con un festival de importaciones”. Por eso planteó que “debemos pensar cómo articular más adecuadamente el Banco Central, el Ministerio de la Producción y la AFIP”.

“A mí no me interesa quedar bien con ningún funcionario. A mí me interesa quedar bien con la sociedad, con los argentinos que nos votaron y a eso no voy a renunciar”, reflexionó la titular del Senado. Durante su mensaje, que se extendió por más de una hora, criticó a los “empresarios que miran para otro lado” cuando se describen irregularidades o maniobras que perjudican el interés colectivo, y llamó al Estado a recuperar la administración y auditoría de los planes sociales, cuya gestión “no debe ser tercerizada”.

Para el final de su disertación dejó una de las frases más picantes de la fría tarde-noche en el conurbano, con palabras que aún retumban. “Ganar las elecciones para no cambiar nada, mejor quedarse en casa”, sentenció, en lo que pareció una clara alusión al presidente Alberto Fernández.

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