El fútbol es para los argentinos una pasión que va más allá de lo racional. Se replica en tatuajes de escudos e ídolos estampados en distintas partes del cuerpo; recorridos a pie o en bicicleta para cumplir promesas hechas por la obtención de un título; cábalas tales como dejarse la barba o no bañarse por días, además de tantas otras excentricidades que muchos hinchas se proponen con tal de que a su equipo le vaya bien.
En el oeste surgió un nuevo acontecimiento inédito: el abuelo de un niño con fecha de nacimiento prevista para el próximo 17 de mayo, decidió hacerlo socio del Deportivo Morón aportando como foto para el carnet la que proporcionó una ecografía 4D estando aún en el vientre de su madre.
Ocurre que Alberto Pastorino es hincha fanático del Gallo, y a pesar de vivir en Lanús, continua siguiendo férreamente al club de sus amores. Tal es así que decidió transferirle su pasión a su primer nieto, Romer Dorta, y lograr así que sea el socio más joven de la institución.
El argumento que esgrimió Pastorino ante Primer Plano Online fue sencillo: “La idea de hacerlo socio surgió porque mi hijo y yo somos hinchas de Morón y no queremos correr el riesgo de que se haga de Lanús o El Porvenir”, explicó entre risas.
La mamá del bebé en camino, Micaela Pastorino, es hincha del Granate y cuenta que ella quería que su hijo siga sus pasos, pero que por el fanatismo y la pasión de su padre, sabía que el pequeño tarde o temprano terminaría siendo del Gallo. Sin embargo, cuenta enternecida que la elección le parece atinada, ya que “el abuelo podrá compartir momentos únicos con su nieto”. Y añade: “Con mi pareja llegamos a un acuerdo de que si entra al quirófano a presenciar el parto le vamos a poner la ropa del Deportivo Morón ni bien nazca”.
Por su parte, Romer Dorta padre, oriundo de Venezuela, le contó a Primer Plano Online cuál fue su reacción al tener la cédula de socio del Gallo de su pequeño tocayo: “Cuando me entregaron el carnet de Toto (como ya llama a su hijo) sentí una gran emoción, ganas de llorar y solamente agradecí porque al mismo tiempo fue un regalo por mi cumpleaños. Al ser padre primerizo es un sentimiento totalmente nuevo y al ver el carnet sentí que ya está acá presente y ya es hincha de un equipo”, concluyó.
Además, recordó cuando su suegro Alberto lo llevo por primera vez a un estadio de Argentina a ver un partido del Deportivo Morón: “Allí concebí mucho de mi barrio. La adrenalina que se siente y el corazón de la gente que apoya a su equipo. Me encantaron las canciones que tenían y lo mucho que las personas pueden llegar a amar un equipo en este país. El sentimiento fue único, iría siempre a la cancha”, finalizó Romer.
Lo cierto es que el canto que suele bajar de las tribunas y corea “soy del Gallo desde que estaba en la cuna”, al pequeño Romer ya le quedó chico. Sin que haya abierto los ojos por primera vez en este mundo ya forma parte de la gran familia del Deportivo Morón.
