En Cambiemos siguen masticando bronca contra el peronismo. Por lo bajo, acusan a los intendentes del conurbano que avalaron la designación de la matancera Verónica Magario de haber traicionado un acuerdo no escrito pero avalado de palabra desde principios de año. Allí, en las mesas de negociaciones de las que participó hasta el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, se había hablado de una conducción rotativa y colegiada para la Federación Argentina de Municipios (FAM), que respondiera al nuevo escenario político e institucional que emergió tras la elección de octubre pasado. Pero nada de eso ocurrió: el PJ impuso condiciones, eligió a la jefa comunal de La Matanza para reemplazar a Julio Pereyra, y ahora toma fuerza el rumor de que radicales, Pro y aliados avanzarán en la confección de una estructura similar pero con el apoyo del aparato del Estado nacional y provincial.
En declaraciones periodísticas, el subsecretario de Asuntos Municipales de la Nación, Lucas Delfino, intentó restarle legitimidad a la elección de Magario. “A su asunción faltaron más de 600 municipios del Frente para la Victoria”, disparó el ex candidato a intendente de Hurlingham por Cambiemos. “Es lamentable pero el espíritu con el que nació la FAM, pensado como un espacio de defensa de los municipios de carácter plural, participativo y federal, vuelve a quedar sometido por los intereses personales de dirigentes mezquinos”, indicó.
Delfino, que fue el principal negociador con las distintas vertientes del peronismo, detalló también que “desde el Gobierno agotamos las instancias de diálogo para proponer un triunvirato, un cuerpo colegiado que represente todas las expresiones políticas y así evitar que esté manejado de manera arbitraria por ningún partido”.
INVERSIONES
La intendenta de La Matanza se propuso como desafío de esta nueva etapa al frente de la federación de municipios “trabajar es que los intendentes volvamos a tener protagonismo que supimos tener con el gobierno nacional anterior, recibir las inversiones como las recibíamos antes”.
Consultado por esa definición de Magario, Lucas Delfino respondió tajante: “desde el Gobierno Nacional se han girado cerca de mil millones de pesos para obras que estaban paradas en La Matanza”. Luego, concluyó con una frase que deja al descubierto la grieta que se profundiza con el grupo de intendentes peronistas que más resistencia tienen al Gobierno de Cambiemos, tanto en nación como en provincia: “Lo que hay que entender es que las obras publicas no son de los intendentes, son de la gente”.
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