
Fallaron los cálculos. Tras una inversión de 1200 millones de pesos y una obra que obligó a suspender el servicio del Sarmiento durante una semana, las pruebas de resistencia del puente de hierro recientemente montado determinaron que algunas locomotoras pasan muy ajustadas, mientras que los vagones directamente no pueden hacerlo.
Especialistas en el tema manifestaron que “las locomotoras diesel y todo el material rodante de larga distancia de origen chino no podrá circular por dicho puente ferroviario, ya que rozan con los parantes que se encuentran a los costados”.
En este contexto, Diego Hormachea, directivo de la Seccional Oeste de la Unión Ferroviaria (UF), explicó que los conductores “advirtieron que la máquina pasaba muy justo contra el borde, entonces trajeron vagones de los que van a Chivilcoy y comprobaron que el puente es demasiado angosto”. Definitivamente los cálculos fallaron: el puente tiene 3,40 metros de ancho mientras debería haber sido de al menos 4,20.

A pesar de que las formaciones que hacen el ramal Moreno-Mercedes pasan -con lo justo- por el puente, el movimiento natural del andar convierte al paso en un riesgo latente. “En un bamboleo, la baranda del puente te arranca las manijas”, graficó Hormachea.
El funcionario que debe responder por el error es Javier Iguacel, titular de Vialidad Nacional. De activa participación en redes sociales, salió a hacer alarde de la rapidez con la que fue montado el by-pass de Luján. Pero la celeridad no siempre va de la mano de la eficiencia, y éste fue un caso que corrobora la máxima.
Desde el viernes de la semana pasada, la obra de la Autopista 5 esperaba el reemplazo de las vías del tren por el by pass de conexión con el Acceso Oeste. Por eso, el servicio ferroviario estuvo suspendido… y seguirá así.
La planificación de la puesta en vigencia de la esperada obra suponía que el sábado pasado se retomaría paulatinamente el servicio, hasta operar con normalidad desde el lunes 27. Sin embargo, la restricción entre General Rodríguez y Mercedes continuará al menos una semana más.
¿La solución? “Al parecer retirarán hacia afuera las barandas para ganar espacio. Pero hay que aclarar que esas estructuras no están de adorno, sino que constituyen un refuerzo real sumamente necesario” aclaró Hormachea. “Hay que tener mucho cuidado con lo que se haga”, advirtió.